¡LLUEVE EN MEDELLÍN! CONSEJOS PARA MOVERTE EN BICI DE MANERA SEGURA

¡Volvió la lluvia a Medellín! Te damos algunos consejos que te facilitarán las cosas por estos días:

 Prepara tu bicicleta

Lo primero y más importante es asegurarte, antes de salir, de que tu bicicleta se encuentre en perfectas condiciones, empezando por la limpieza de la cadena y el funcionamiento de las luces y el sistema de frenado.

Es súper imporante que revises la presión en las llantas con el fin de evitar que la bicicleta patine sobre el asfalto mojado y puedas caerte. Recuerda que una presión menor en tus neumáticos permitirá que una mayor área de la llanta entre en contacto con el pavimento y se genere un mejor agarre.

Ten en cuenta que no debes bajar demasiado la presión de los neumáticos pues corres el riesgo de dañarlos y tendrás más posibilidades de sufrir una pinchadura.

También debes asegurarte de que los guardabarros de tu bicicleta se encuentren en su punto, para evitar salpicaduras y ensuciarte más de la cuenta.

Elige el atuendo adecuado

Al elegir la vestimenta adecuada no solo estarás más seco y cómodo sino que también te mantendrás más seguro. Utiliza zapatos cerrados, un impermeable liviano y procura que tus prendas sean de colores vivos para que los demás ciclistas y conductores de motos y automóviles te vean con facilidad.

Si sientes que la lluvia te pega de frente, evalúa usar unas gafas de lentes claros para mantener una buena visibilidad.

Una buena idea es llevar una muda de ropa de repuesto en la maleta, ya que si a pesar de todas las precauciones te mojas, podrás cambiarte al llegar a tu destino y evitarás gripas y enfermedades respiratorias.

Conduce con precaución

Ten mucho cuidado con los charcos de colores en el piso, ya que se trata de residuos de aceite y gasolina que son sumamente resbalosos. Evita movimientos bruscos o frenar encima de estos.

A propósito de frenar, hazlo siempre con cuidado para no resbalar. También puede ocurrir que quien va delante de ti frene con brusquedad y choques por no tener tiempo de detenerte. Por eso siempre debes conducir despacio y manteniendo la distancia.

 Finalmente, ármate de paciencia y recuerda que la prudencia es tu mejor consejera a la hora de manejar.